Extraviados
Don Felipe de Torremayor se hincó de rodillas frente a la imagen de la Sagrada Cruz y oró, sabiéndose ya vencedor; llevaba puesta su indumentaria para partir raudo con sus justicieros acólitos, a Las Cruzadas; en su peto lucía la cruz roja y en su corazón el sentimiento ardoroso de la Verdad Única.
A mucha distancia, Amad Jamed se hallaba arrodillado asimismo, mirando a la Meca, dispuesto ya para la batalla, de la que juzgaba que él y sus tropas saldrían victoriosos, puesto que ellos luchaban por la Incólume Verdad y Alá, sin duda alguna, estaría con ellos.
Arriba, en las Divinas Alturas, Dios o Alá, comprendió que los hombres seguían siendo ciegos, tercos y feroces y que, ni las misericordiosas enseñanzas de Su Jesús ni las benditas doctrinas de Su Mahoma, habían logrado nada en absoluto.
A mucha distancia, Amad Jamed se hallaba arrodillado asimismo, mirando a la Meca, dispuesto ya para la batalla, de la que juzgaba que él y sus tropas saldrían victoriosos, puesto que ellos luchaban por la Incólume Verdad y Alá, sin duda alguna, estaría con ellos.
Arriba, en las Divinas Alturas, Dios o Alá, comprendió que los hombres seguían siendo ciegos, tercos y feroces y que, ni las misericordiosas enseñanzas de Su Jesús ni las benditas doctrinas de Su Mahoma, habían logrado nada en absoluto.
6 comentarios
Espuma -
(gracias por la visita, guapetones) :=)
pitufinarosa -
Besillos espumosos.
Goreño -
Hola, Guana, qué pasó contigo, no se te ve el pelo.
Espuma -
encantada de recibiros en mi humilde blog.
gracias por venir!
Guana... que sí, que ya sé que es el Connery y como me gusta mucho, que es un actor genial, me los adjudiqué... je,je.
oye, Guana ¿te fuiste de Atra? no te encuentro por ningún sitio, no estás...
no te vayas... :(
guanachinerfe -
Pablo A -
Siempre tan genial.
Un abrazo