El volcán del Hierro juega al escondite
Y ora aparece el burbujeo, y ora se esfuma. No sabemos en qué terminará todo esto, ese constante movimiento de la tierra, ese a veces ruido o crujido, ese volcán que no acaba de asomar, o quizá nunca lo haga. Lo que sí sé es que los herreños lo están viviendo con bastante nerviosismo, evacuados y vueltos a evacuar, esperando a ver qué pasará. Ojalá que sea un hermosísimo volcán, puede incluso que emerga un islote, eso depende de cuánto tarde y a qué profundidad está o llegue. Un volcán que haga regresar a los turistas y que El Hierro se recupere de todas estas pérdidas económicas de hoy. Pescadores sin faenas, restaurantes sin clientes, comercios cerrados... Esperemos que todo acabe bien y que tengamos otra islita para mirar y disfrutar. Le cuesta al volcán salir, es como un parto difícil y percibir esos dolores continúos que sufre la tierra de El Hierro es algo terrible: Que sea un alumbramiento feliz.
2 comentarios
Espuma -
a ver en qué queda.
un abrazo amigo
Piedra -
Abrazos
Piedra